Exposiciones
Carlos Bunga habita la contradicción en la Fundação Gulbenkian
Una exposición monumental sobre el refugio, la identidad y la transformación que se podrá visitar hasta el 30 de marzo de 2026.
El artista portugués Carlos Bunga (Oporto, 1976), afincado en Barcelona, presenta en el Centro de Arte Moderna de la Fundação Calouste Gulbenkian de Lisboa su nueva gran exposición, Inhabit the Contradiction (Habitar la contradicción), una de las intervenciones más ambiciosas de su carrera. La muestra, comisariada por Rui Mateus Amaral y que cuenta con el apoyo del Institut Ramon Llull, podrá visitarse del 8 de noviembre de 2025 al 30 de marzo de 2026 y se adentra en los conceptos de refugio, identidad y transformación a través de un lenguaje material tan frágil como poderoso.
El trabajo de Bunga se ha definido por su capacidad de convertir lo efímero en estructura. Utiliza materiales cotidianos —cartón, cinta adhesiva y pintura doméstica— para construir arquitecturas temporales que dialogan con el espacio expositivo y lo transforman por completo. Sus instalaciones, a medio camino entre la escultura y la arquitectura, nacen del gesto de levantar y derribar, de habitar y deshabitar, en una reflexión constante sobre la precariedad y la temporalidad.
Carlos Bunga, 'Motherhood', 2025. Cortesía del artista.
La exposición parte de uno de sus dibujos, My First House Was a Woman, 1975 (2018), una obra que alude a la migración de su madre de Angola a Portugal y que actúa como detonante simbólico. Desde ese origen, Bunga articula un discurso sobre el “habitar” —el hogar, el refugio, el nomadismo— y sobre la arbitrariedad del poder arquitectónico, entendido como metáfora social y política. La memoria, el cambio y la transformación atraviesan cada uno de los espacios intervenidos, invitando al visitante a caminar, rodear y experimentar las piezas desde dentro, como si se tratara de una arquitectura viva.
En las salas del CAM, columnas y muros de cartón se erigen como un bosque de estructuras efímeras que desdibujan los límites entre interior y exterior. La exposición no solo se contempla: se habita y se transita, en una experiencia inmersiva que evoca tanto la vulnerabilidad del espacio como la del propio cuerpo.
Carlos Bunga, 'Fragmentos', 2000. Cortesía del artista.
Inhabit the Contradiction reafirma a Bunga como una de las voces más singulares del arte contemporáneo portugués. Su práctica, que conecta la historia personal con cuestiones universales —el desplazamiento, el refugio, el cambio—, convierte la fragilidad en una forma de resistencia. Para la Gulbenkian, esta intervención representa una apuesta decidida por proyectos capaces de transformar el espacio y expandir la experiencia artística más allá del objeto.
Paralelamente a la instalación, se ha publicado un amplio catálogo que incluye textos de Rui Mateus Amaral y ensayos de destacados autores internacionales como Roland Groenenboom, Omar Kholeif, November Paynter, Rina Carvajal y Catarina Rosendo.
