Exposiciones
Eufloria: Un viaje sensorial al esplendor floral de la Colección Kaluz
Las obras de la muestra celebran la belleza de las flores y reflexionan sobre la vida y su naturaleza efímera.
El Museo Kaluz de Ciudad de México, ubicado en un antiguo hospicio del siglo XVIII, presenta hasta el 15 de septiembre Eufloria. Esplendor floral en la Colección Kaluz, una muestra que reúne más de 50 obras de artistas mexicanos y europeos de los últimos tres siglos. La exposición comisariada por Sara García Fernández ofrece un recorrido visual fascinante por las representaciones florales más emblemáticas, invitando al público a descubrir el esplendor y la diversidad del lenguaje artístico a través de las flores.
Lejos de limitarse a un simple motivo decorativo, la exposición propone a las flores como un lenguaje cargado de simbolismo y como un puente hacia reflexiones sobre el pensamiento ecológico contemporáneo. La exposición se presenta como un homenaje a la eterna fascinación que las flores han despertado en los artistas a lo largo de la historia. Desde la delicadeza de las rosas hasta la intensidad de los girasoles, la muestra pone especial atención en la flor silvestre cacaloxóchitl, conocida como flor de mayo, que se refleja en los antiguos Códices Florentino, de Huamantla y De la Cruz Badiano, conectando así la tradición artística con la riqueza simbólica de la naturaleza.
Alfredo Ramos Martínez, Flores, 1911, Colección Kaluz.
Organizadas en siete núcleos temáticos, la exposición no sigue un orden cronológico, sino una ruta sensorial a través de siete núcleos temáticos., las obras dialogan entre sí para explorar conceptos tan diversos como la abundancia y la fragilidad, la memoria y el intercambio cultural, así como la sensualidad propia del mundo vegetal. Este enfoque permite al espectador adentrarse en un universo donde la belleza estética se entrelaza con la conciencia ambiental y la riqueza conceptual, revelando cómo lo floral puede convertirse en un espejo de nuestra historia, nuestra cultura y nuestra relación con la naturaleza.
El camino se traza a partir del diálogo con la mirada y se hace con los elementos de la abundancia, cornucopia, bouquets, balcones y jardines, flores de Manila, A cielo abierto y La flor caída. Cada sección aborda una perspectiva única sobre la interacción entre las flores y la creación artística, abarcando desde su función decorativa hasta su significado simbólico.
José Agustín Arrieta, Retrato de Josefa María Sanz, sin fecha, Colección Kaluz.
“En la exposición se verán flores como la magnolia, que tiene más de 90 millones de años, por lo que se considera como un fósil viviente, pero más allá de hacer esa reflexión, esta exhibición marca a la pintura, en la que diversos artistas se han dedicado a representar la planta”, explica Miguel Fernández Félix, director del Museo Kaluz.
Obras de artistas como Josefa Sanromán con una obra espectacular de un bodegón sin título, Alfredo Ramos Martínez, Joy Laville, José Agustín Arrieta, Leonora Carrington y Francisco Camps Ribera, entre otros, brindan una visión renovada del arte floral. La muestra se complementa con un impactante mural de Dulce Chacón y una innovadora estación olfativa creada en colaboración con el MUPE, que invita a los visitantes a experimentar las flores no solo con la vista, sino también con el sentido del olfato.
