El Museo de Arte de Girona inaugura con Francisca Rius y Sanuy (1891-1967). Diseño y vida la primera retrospectiva monográfica dedicada a esta artista catalana. La muestra pone en valor la trayectoria de una creadora que, a causa de las circunstancias sociales y políticas del siglo XX, había quedado injustamente relegada al olvido. Comisariada por su nieto, Domènec Ribot, la exposición presenta al público una selección de obras inéditas, mayoritariamente procedentes de colecciones familiares, y se podrá visitar hasta el 6 de abril de 2026.

Francisca Ríos y Sanuy. 'Asutzena', 1914. Colección particular.
Nacida en Barcelona el 11 de diciembre de 1891, Francisca Rius se formó en la Escuela de la Lonja, donde destacó por su sensibilidad artística y obtuvo diversos reconocimientos, incluida la medalla de plata de la Academia Provincial de Bellas Artes en el año 1914. Desde muy joven participó en exposiciones en Barcelona.
Su obra combina el modernismo y el arte-déco en un lenguaje propio, delicado y armonioso. Sus dibujos estilizados, inspirados en la naturaleza, los patrones para bordados y las ilustraciones muestran sutiles formas, colores ricos y una fuerza decorativa casi musical. Aunque la obra conservada es escasa, representa un radiante testimonio del arte de la estilización, pensado para dialogar con las necesidades de las industrias creativas de la época, transformando la simplificación de las formas en pura expresión artística.

Francisca Ríos y Sanuy. 'Estilización floral con pájaro rojo', c.1914. Colección particular.
La retrospectiva actual nace del precedente de la exposición Feresa de Silenci (2022), dedicada a las artistas que habían publicado en la revista Feminal y comisariada por Elina Norandi, que sacó a la luz trayectorias prácticamente desconocidas. Siguiendo la línea del museo de recuperar y valora a las mujeres artistas de todas las épocas, se asumió el compromiso de dedicar una muestra y un catálogo a Francisca Rius, restituyendo la memoria y la dimensión artística de una creadora singular.
Su obra conservada en colecciones públicas es escasa. Algunas piezas se custodian en el Museo del Diseño de Barcelona, como sus patrones para bordados, y en el Archivo Nacional de Cataluña se conserva documentación diversa, incluido el manuscrito original de su Diari íntim. Este dietario, escrito entre 1938 y 1939 desde la retaguardia y destinado a su hijo en el frente, ofrece un testimonio íntimo y emotivo de la vida cotidiana en tiempos de guerra, y se publicó en 2009, lo que permite redescubrir la mirada personal y sensible del artista.
A través de esta exposición, el Museo de Arte de Girona recupera no sólo la obra de una artista olvidada, sino también parte esencial del patrimonio cultural catalán, favoreciendo la creatividad, la delicadeza y el ingenio de una mujer que supo transformar la simplificación formal en belleza artística.