MORTALS+ es una exposición nacida de un proyecto de investigación colectiva que conecta arte, salud y memoria. La propuesta reúne testimonios y miradas de personas vinculadas al VIH/Sida, convirtiendo sus vivencias en un espacio de reflexión artística y social. El resultado es un recorrido que reivindica la memoria colectiva, explora las políticas del cuerpo y da visibilidad a las narrativas a menudo silenciadas de esa realidad.
El pasado 1 de diciembre era el día Mundial del Sida y el arte se convierte en un puente entre la memoria y el presente. A través de obras, gestos y miradas, el mundo artístico recuerda a quienes ya no están, acompaña a quienes siguen luchando y celebra los avances logrados. El arte tiene la capacidad de transformar el dolor en expresión, la invisibilidad en relato y el estigma en conciencia colectiva.

Susana Solano, La pareja núm. 1, 1988, Colección Suñol Soler.
Esta nueva exposición temporal que se podrá ver hasta el 13 de marzo, se presenta como la continuación natural de MORTALS , un proyecto que, desde hace años, investiga de forma colectiva cuestiones como la muerte, la enfermedad, los cuidados y la propia experiencia de vivir a través del lenguaje artístico. En esta nueva edición, la implicación de la Fundación Suñol -responsable de una de las colecciones privadas de arte contemporáneo más relevantes del país- y de la Fundación Glòria Soler -comprometida con la investigación en salud global y la intersección entre arte y ciencia- ha hecho posible un espacio de encuentro entre arte, salud y memoria. Un espacio que conecta los legados del pasado con las realidades actuales de la epidemia del VIH/Sida.
El acceso al fondo de la Colección Suñol Soler ha permitido trazar conexiones entre diversas piezas artísticas y las ideas emergidas durante las sesiones de trabajo con el grupo MORTALS+. Este grupo, integrado por personas vinculadas al VIH/Sida, investigadoras, activistas y profesionales de la salud, ha contribuido a generar un discurso compartido que enriquece y resignifica las obras seleccionadas.

Chema Cobo, Sweet swimmers, 3 selfwatchers, 1981-1982, Colección Suñol Soler.
Del placer al estigma , Testimonios , Monstruos y estigma y Carta al Universo articulan el hilo conductor de una muestra que propone un recorrido abierto y no lineal. La exposición se inicia evocando el contexto de libertad y exploración sexual de los años ochenta, para después adentrarse en los relatos, miedos e imaginarios que han marcado la experiencia del VIH/Sida. El recorrido culmina con el vídeo Mortales+ (2025), presentado en diálogo con Sin título (1970), de Zush/Evru, una convivencia que cierra la propuesta poniendo pasado y presente en tensión poética y crítica.