La revolución del placer es el título de la nueva exposición de Mari Chordà (Amposta, 1942) en el Espai Guinovart de Agramunt. Un recorrido expositivo inaugurado el pasado 20 de julio y que podrá verse hasta el 23 de noviembre con una selección de pinturas centradas en la exploración del cuerpo, pero también tendrá una relación directa con el deseo y la sensualidad femenina.
Mari Chordà ha creado una muestra con obras de varias décadas, con las características formas curvas y paletas vibrantes que construyen el imaginario del artista, pero también existe una evidencia de la lucha feminista de Chordà en un contexto represivo.

Fotografía: Albert Malet, por cortesía de Espai Guinovart Agramunt.
Esta muestra propone adentrarte en la obra de una artista innovadora que, desde la década de los sesenta, rompió con las normas de una sociedad opresiva para investigar, con una sinceridad impactante, la sensualidad femenina desde un punto de vista personal y emancipador. Mari Chordà es una de las pioneras en arte feminista y siempre crea un arte que va en paralelo a la acción social.
Assumpta Bassas explica cómo "la osadía de Chordà reside no sólo en lo que pinta, sino en el cómo y en el cuándo". Una exposición en Agramunt y el Espai Guinovart que toma el relevo de la gran exposición de Mari Chordà… y muchas otras cosas del MACBA del pasado 2024. La imagen, el lenguaje y el compromiso social constituyen los pilares de la obra de Mari Chordà y están profundamente entrelazados con su trayectoria vital: la artista, la artista, la unidad inseparable que da forma a una forma de ser ya unas convicciones que atraviesan tanto su producción creativa como su biografía.

Fotografía: Albert Malet, por cortesía de Espai Guinovart Agramunt.
Ahora es momento de La revolución del placer . De detenerse en cada detalle de esta exposición temporal, con los elementos curvados, lleno de color y formas que son tan protagonistas en sus creaciones. Invita la mirada a entender el arte como un espacio irrenunciable de placer y revolución. Explícita como pocas la exploración de la feminidad y la corporalidad, pero también tiene un compromiso feminista, crea a partir de la fusión de disciplinas, juntando autenticidad y expresividad con colorido intenso y formas orgánicas.

Fotografía: Albert Malet, por cortesía de Espai Guinovart Agramunt.